Me entró curiosidad por la foca monje al descubrir por la entrada anterior que es una de los diez especies más amenazadas de todo el planeta.
La población original de foca monje era muy abundante, formaban grandes colonias y se extendía por todo el Mediterráneo, el Mar Negro y parte de la costa atlántica (Marruecos, Sáhara Occidental, Mauritania, Senegal y las islas de Madeira, Canarias y Cabo Verde).
El hombre empezó a masacrarlas en el siglo XIX cuando empezó a habitar en las zonas de la costa y los pescadores competían con ellas por el mismo alimento. Como les robaban el pescado y destrozaban sus redes de pesca, las mataban sin escrúpulos para ser los dueños del mar. Las capturas accidentales, la falta de alimento por la sobrepesca y la contaminación acabaron de hacer el resto.
Actualmente sólo existen unos 500 individuos, divididos en diferentes colonias, siendo las más numerosas las de Grecia, Turquia y Cabo Blanco (Sahara Occidental). Son colonias aisladas con pocos individuos, lo que las empobrece genéticamente, y quizás una de las causas por las que murieran súbitamente una gran parte de la colonia de Cabo Blanco en 1997 cuando les afectó una mortal epidemia.
Aunque en el pasado su hábitat eran las playas, ahora la foca monje se refugia en cuevas de difícil acceso, protegidas del oleaje y alejadas de los núcleos habitados.
El proyecto de conservación de la foca monje del mediterráneo en Cabo Blanco lo desarrolla una ong española (CBD- Hábitat) con el apoyo de otras instituciones. Su función principal, además de controlar las zonas de cría y hacer seguimiento de la reserva, es la de apoyar a los pescadores locales, mejorando las condiciones de vida para que se involucren en la conservación de la foca monje.
El año pasado se producto un avistamiento de una foca monje en las islas baleares lo que animó más al Consell Balear en su proyecto de reintroducir la especie en su zona y editó un libro con impactantes y bellas fotos para ayudar a conocer y concienciar sobre esta especie. Lo podéis consultar aquí.
En 1958 un guardia civil mató a la última foca monje en Mallorca por considerarlo un animal peligroso. Su nombre cientifico es Monachus monachus pero es más conocida como el “vell marí” (que significa viejo marino). Aunque la noticia del avistamiento en las islas es esperanzadora, los nombres de algunas calas y cuevas de las islas es lo único que nos queda (Cova des Vellmarí, Cova del Llop Marí...)
Son tan simpáticos estos seres marinos. No sé cómo hay genteque se atreve a hacerles daño con esa carita que tienen.
ResponderEliminarMuy interesante la entrada, aunque los datos sean tan desmoralizadores como siempre...
Un abrazo.
Pues si!! Estoy de acuerdo con Perséfone. La información superinteresante y los datos estremecedores. Pero bueno..con información como la que cuelgas tu en tu blog habrá cada vez más gente informada y espero que también concienciada.
ResponderEliminarMuchas gracias por todas estas cositas interesantes. Contigo aprendemos una cosa nueva cada día.
Un saludo.
Gracias Perséfone y Marisilla por vuestros comentarios...Aunque los datos sean pesimistas nunca hay que perder la esperanza en la recuperación de especies amenazadas. Lo que es desmoralizador es la ignorancia o el desinterés de la gente por estos temas.
ResponderEliminarHace un par de años tuve la suerte de vivir justo en la zona que aparece marcada en rojo en Marruecos, donde se supone que habita la foca monje, jamás la vi... pregunté a los marineros y a las gentes del lugar y nunca nadie las había visto...
ResponderEliminar"Es así de sencillo",por desgracia digo... De repente un día contamos los individuos de una especie y descubrimos que quedan muy pocos. A veces son tan pocos que la expecie ya se da por extinguida... Somos así...
Supongo que nuestra labor y la de nuestros blogs es que seamos un poco menos "así", y aprendamos a ser de otra forma...
Un saludo. ANZAGA.
http://unpaseomanchego.blogspot.com/